Purificar el corazón


"Purifica tu corazón
antes de permitir que el amor se asiente en él,
ya que la miel más dulce
se agria en un vaso sucio".




Una enseñanza muy válida en este tiempo de cuaresma.

Purificar conlleva la dura tarea de autocrítica, del examen de nuestros actos. Implica hacerse responsable de los propios vicios y errores. Sufrir las consecuencias con profundo arrepentimiento.
Solo el dolor purifica y renueva.

Luego del llanto y la renuncia, viene la paz y la luz.
Es en ese estado que comienza el amor a anidar en las almas.


6 comentarios:

gosspi dijo...

Esta ha sido mi experiencia..gracias. Este año hará conmigo el Señor Pascua! Un abrazo.

Anónimo dijo...

Como Gosspi dice, esa ha sido mi experiencia, tras el dolor y la renuncia la luz brilla con más fuerza.
Un abrazo Edit.

soylauraO dijo...

Respecto de la educación formal me pregunto ¿por que´nos ocultan al Pitágoras poeta, desde hace 2500 años? JESÚS ha sido sabio, filósofo y economista; pero, gracias a DIOS, su pueblo eligió aferrarse a la FE y al AMOR de sus actos. ¿por qué no hay una materia que sea AMOROLOGÍA Y FE UNIVERSAL, en lugar de llamarse Religión, que tantas polémicas acarrea por intolerancia? Como sociedad, no rendiríamos mejor honor a la palabra de DIOS.Gracias por la reflexión.
Abrazos.

Sor.Cecilia Codina Masachs dijo...

Gracias mi querida Edit por sus hermosas palabras en Estoy a tu lado.
Mucho ha cambiado mi espiritualidad a medida que he ido conociendo a Cristo en la oración y en los estudios de vanguardia en teología.
Cuando entré en el Carmelo mi Madre Maestra me pregunto:
Y usted hermana Cecilia a que cree que ha venido a este monasterio de Carmelitas descalzas?
No tarde en responderle con vehemente pasión tal como soy.
«He venido a aprender a amar para saber sufrir»
Ella quiso rectificarme y ponerme la Cruz antes que el amor, pero se rindió ante EL AMOR DE CRISTO que antes de sufrir la Pasión en la Cruz ya nos amaba.
Con ternura
Sor.Cecilia

Rebecca Rosenbaum dijo...

hola Edith,
esa fase es fuerte y tarda mucho para lograr la calma. Solo hay que tener paciencia.

un abrazo fuerte^^

Anónimo dijo...

Lleva mucho esfuerzo limpiar el vaso ... pero, ahí estamos, y con la Gracia lo conseguimos mucho antes que con las solas fuerzas nuestras.
Un abrazo