Otoño en el Alma

Este tiempo de otoño, nos regala una nueva oportunidad de renovar el alma.
La naturaleza se va desprendiendo de lo externo, de lo accesorio, para adentrarse al invierno. Va guardando su savia en las raíces. 
Las hormigas, las abejas y las ardillas están terminando de acumular sus reservas para sobrevivir la estación del frío. 
Hemos aprendido a desprendernos de lo que no necesitamos para pasar el invierno del Alma?
Hemos sabido guardar la chispa divina de la fe, que es la savia que nos alimenta, en las noches oscuras del ser?
Hemos sido capaces de ir acumulando vivencias gratas, que nos sepan cobijar, en los tiempos de soledad y frío?
Estamos a tiempo de aprender lo que aún no logramos. 
Que este tiempo de otoño tengamos la alegría de sabernos preparados para reencontrarnos en soledad. 
Que nuestro ensimismamiento sea fecundo al tiempo de la primavera.

3 comentarios:

AleMamá dijo...

Edit: ¡qué bonito! y qué bien dicho, mi amiga querida. Da para hacer mucho rato de oración y examen.

Besos

José Ramón dijo...

Edit que belleza en esta entrada una reflexión muy sierra saludos desde…
Abstracción textos y Reflexión.

Claudia Chirino dijo...

siempre tanta calidez y suavidad amiga...
que el otoño traiga suave olor a hojas secas y brisas de chimeneas humeantes de calor.
gracias
clau