EN LA DIFICULTAD, SOLO EL.




A veces el camino se vuelve empinado y muy riesgoso. 
El cansancio, el miedo, la poca fe en nuestras fuerzas 
nos acobardan. Nos invade la desesperación, no podemos dar marcha atrás y no sabemos como avanzar. 
En esos instantes de desolación, llamemos a nuestro Señor, desde lo mas profundo del alma, con toda nuestra fuerza, con una fe ciega, sabiendo que solo El nos puede salvar. 
El nunca nos defrauda.
El sabrá allanarnos el camino.
Y seguramente nos sorprenderá, porque sus soluciones
no son las que nosotros pedimos, son MEJORES.

3 comentarios:

Marian dijo...

Es verdad Edit, te felicito por tu post. ¡Gracias! un abrazo.
Bendiciones!!!

quedateenminube dijo...

Ay, qué bonito y cierto!Completamente de acuerdo, en la dificultad siempre acudimos a Él y a mi me reconforta y consuela saber que es mi Padre.
Un abrazo!

http://quedateenminube.blogspot.com.es/

gosspi dijo...

Cuantas vidas..la Mia..ha sido salvada por esta Verdad..Edit, es asi, la Esperanza que nace de Dentro no es nuestra y es una Gracia Inmensa poderla detectar...para transmitirla a raudales!!